El cineasta mexicano Luis Estrada, quien esta mañana presentó el primer avance de su filme La dictadura perfecta, que llegará el próximo 16 de octubre a mil 200 salas de cine de todo el país, explicó que tuvo que modificar la fecha de estreno, prevista para mayo, debido a que Videocine decidió no distribuir la cinta.
El más reciente trabajo del director de La Ley de Herodes (1999), Un mundo maravilloso (2006) y El Infierno (2010) es una comedia satírica en la que Estrada expone, mediante una ficción, los enredos de algunos miembros de la clase política mexicana.
El cineasta convocó a los medios de comunicación a presenciar el avance del filme, el cual contó con el apoyo del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta), por conducto del Instituto Mexicano de Cinematografía, Estudios Churubusco y el gobierno del estado de Durango.
También participó Televisa, con 20 millones de pesos, y se contó con el Estímulo Fiscal a Proyectos de Inversión y el Fondo Nacional para la Cultura y las Artes (Fonca).
La llevé a distintos distribuidores nacionales y trasnacionales, quienes me dijeron que a pesar de que veían que la cinta tenía gran potencial comercial, no querían agarrar la papa caliente, así que tuve que buscar otras opciones, y afortunadamente Alphaville Cinema aceptó el riesgo, expresó el cineasta en conferencia de prensa.
Estrada confía en que la película sea recomendada a través del boca a boca. Yo espero que no haya sabotaje ni complot, aunque supongo que habrá medios que me aplicarán la ley del hielo, aseguró el cineasta, quien señaló que “La dictadura perfecta es una película provocadora que va a despertar mucha controversia y polémica, pero al final de cuentas sólo es eso, una película de ficción”.
A manera de ejercicio, el cineasta presenta en La dictadura perfecta, una historia que involucra al gobernador Carmelo Vargas (Damián Alcázar) en negocios ilícitos, mientras un productor y un conductor de noticias son comisionados para cambiar la imagen del político ante la opinión pública.
Sobre el elenco que participa en la cinta –entre otros, Damián Alcázar, Silvia Navarro, Joaquín Cosío, Alfonso Herrera, Tony Dalton y Osvaldo Benavidez–, Luis Estrada señaló que la mejor manera de acercar al público a ver cine mexicano es que se vea atraído por los protagonistas.
Hay un público potencial para el cine, y creo que el reto del cine mexicano es buscar la manera en que la audiencia se acerque a las películas que se realizan en el país y dejar de lado el divorcio que existe entre el cine etiquetado como comercial y el cine de calidad, indicó Estrada, quien se dijo apasionado de la política y la historia.
Consideró que la clave radica en lo que se ofrece al espectador, que tiene que pagar un boleto para ver una película, y la mayor cantidad de atractivos posibles. En la medida en que los actores sean lo más populares posibles y reconocidos por el público se apela a uno de tantos imanes que se requieren para acercar a la gente, dijo.
Fonte/Créditos : jornada.unam | Alfonso Herrera Brasil
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