La actriz decidió invertir una beca otorgada por el Fonca para realizar este proyecto
Después de que el Fonca otorgara a Ximena Ayala una beca como actriz en cine y video, decidió transformar esos fondos en una inversión, que, además de generar trabajo para otras personas dentro de un proyecto en equipo, significó la posibilidad de generar nuevos espacios escénicos para mostrar su trabajo.
Y es que hoy por hoy Ximena considera que es necesario voltear a ver la ventana tan inmensa que ofrece el Internet, justamente para mostrarle al mundo el trabajo que saben hacer.
Este fin de semana concluyó la grabación de Yo también soy Marilyn, una serie de siete capítulos que se estará trasmitiendo en noviembre próximo en la red, y que esperan sea el primero de muchos proyectos de esta naturaleza.
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En vez de que escribiera una obra de teatro para montarla decidí escribir una serie donde estoy actuando, y abriendo la oportunidad de este nuevo espacio que es el Internet y que nos permitirá a su vez que el trabajo sea visto en otros rincones del mundo”, platicó Ayala durante la filmación de la última escena de este proyecto en el que cuenta con tres cómplices: Silvia Navarro,
Alfonso Herrera y Fabiola Peña en la producción.
Yo también soy Marilyn cuenta la historia de Esperanza, una chica que junto con su familia viaja de Veracruz a México buscando convertirse en cantante gracias a un programa de televisión, en el camino conocerá a su artista favorita y además tendrá la posibilidad de convivir con su tía lejana, una diva del cine mexicano de la década de los 70.
En el elenco participan Norma Lazareno, Pedro López Heredia, Denisse Guerrero, vocalista de Belanova; Ximena Ayala y Amaranta Ruiz, quien después de varios años alejada de la comedia, regresa al género con un personaje “suculento”.
“Ha sido un trabajo muy enriquecedor porque ya tenía mucho tiempo de no hacer comedia pero me llamó mucho la atención el proyecto, la propuesta y además, se me permitió hacer anotaciones al proyecto y formar parte de él”, platicó Amaranta.
Y es que aunque el formato no es de comedia propiamente, resulta ser tan cotidiano y ácido que provoca un humor muy actual.
“Queremos sí humor pero no el chiste fácil, sino algo más irónico y ácido, no el albur o el doble sentido de los noventa, ese humor ya pasó de moda y los chavos hoy día se ríen de otras cosas”, dijo Ruby Castillo, directora de la serie y co creadora del proyecto, que debuta en este género pero que ya tenía la experiencia de cortometrajes y videoclips.
Esta producción aunque no cuenta con gran presupuesto se ha preocupado por ofrecer calidad, ya que de los involucrados ninguno es improvisado y cada quien ha tratado de lucirse en lo que le toca.
“Tratamos de pagarle a todo el mundo aunque sea poquito, y la verdad es que muchas personas nos prestaron sus cosas, ha sido un proyecto de mucho corazón” expresó Castillo.
Fonte: milenio.com